Hace algunas fechas publicamos en este blog un artículo sobre el Fuero de Lapuebla de Argantzun, donde veíamos cómo la memoria histórica de aquella villa en particular había quedado desfigurada debido a la directa falsificación del Fuero original de Sancho VI el Sabio de Navarra, por el burdo método de hacer desaparecer el documento original, cambiando el nombre del rey navarro por el del castellano Alfonso VIII en la copia hecha en 1562.
Recientemente hemos leído un artículo en el Diario de Noticias de Álava, en el que, por una parte, se relataba cómo “un grupo de vecinos de la localidad [Labastida] escenificó la entrega de los Fueros por parte de los reyes de Nájera-Pamplona, el gobierno que reinaba durante aquellos años”, mientras que por otra se decía que dicha escenificación era un “recordatorio de los días en los que el rey Fernando II otorgó la Carta de Fueros a Labastida, garantizando a sus vecinos las libertades y a sus instituciones la autonomía local”.

Vista de Labastida, flanqueada por un viñedo y resguardada por la Sierra de Cantabria, antiguamente conocida como Sierra de Navarra (Iturria: http://www.luhartz.com)